Cada vez más empresas toman conciencia de lo importante que es preservar la salud de sus empleados. No solo a niveles de productividad, el gasto económico que les supone una baja laboral hace estragos en sus cuentas. Además, los trabajadores valoran muy positivamente aquellas empresas que miran por el bienestar de sus empleados. De hecho, lo tienen en cuenta a la hora de escoger o cambiar de trabajo. Los programas de beneficios son un aliciente a sumar a una buena nómina y cada vez son más las empresas que los incluyen en sus incentivos, como Apple .
No es ningún secreto que el dolor de espalda es uno de los dolores más comunes en nuestra sociedad. Nos preocupamos mucho por nuestro aspecto y queremos estar sanos pero a veces descuidamos algo tan básico como la salud de nuestra columna. A lo largo de nuestra vida laboral es más que probable que padezcamos alguna dolencia relacionada con esta. No pasa un día sin que por nuestros centros no pase alguien aquejado de alguna patología relacionada con la columna. La medicina alopática nos prescribe drogas para paliar el dolor. No acaba de aportarnos una solución o, al menos, un alivio que no conlleve una retahíla de medicinas.
Las bajas laborales, un problema de difícil solución… o no
La Asociación de Mutuas de Accidentes de Trabajo (AMAT) ha dado a conocer un informe en el que se demuestra que el dolor en la parte baja de la espalda (lumbar) es uno de los principales problemas de salud en el ámbito laboral. Dicho problema es el responsable del 25% de las bajas por accidente laboral. La duración media de la lumbalgia aguda acostumbra a ser de entre 1 y 20 días y supone un gran gasto sanitario por incapacidad temporal tanto para la empresa como para el Estado. Las repercusiones para todas las partes son más que evidentes.
En nuestro país la tasa de incapacidad ha ido in crescendo, siendo el dolor lumbar la dolencia más común entre los trabajadores. No en vano la lumbalgia es el trastorno más incapacitante del mundo según la OMS.
La repercusión que el dolor de espalda tiene tanto para empresas como para trabajadores es diversa. En cuanto a la empresa, al bajo rendimiento y la reducción de la motivación del trabajador hemos de sumar el aumento de las bajas tanto en número como en tiempo. Cada vez son más frecuentes y de mayor duración. En cuanto al trabajador, aparece una mayor dificultad para manejar el estrés y se incrementa el malestar y la irritabilidad. Esto acarrea una consecuencia clara: MENOR PRODUCTIVIDAD.
La Quiropráctica en el entorno laboral: una necesidad creciente
¿Cómo puede la Quiropráctica ayudar a reducir las bajas laborales? La Quiropráctica es precisamente la profesión sanitaria que se ocupa del diagnóstico, tratamiento y prevención de los trastornos del sistema neuromusculoesquelético y de los efectos de este en la salud en general (definición de Quiropráctica según la OMS). Su objetivo principal es recuperar y mantener una función óptima de la columna vertebral por la repercusión que ésta tiene sobre el sistema nervioso y, en consecuencia, sobre nuestra salud.
En Estados Unidos la Quiropráctica se utiliza en el ámbito de la salud familiar para la prevención, el bienestar e incluso en tratamientos de condiciones neuromusculoesqueléticas. Son muchas las empresas, corporaciones y multinacionales que ofrecen la Quiropráctica como un servicio para sus empleados. El beneficio es claro: sus trabajadores mejoran su estado de salud general, su rendimiento y se reducen las bajas laborales con el consiguiente ahorro para las empresas.
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